Oración De Jabes Ensancha Mi Territorio
Jabes es un personaje que aparece descrito en la biblia como el más ilustre de todos sus hermanos, dado a luz con dolor, por lo que recibió ese nombre que en hebreo se refiere a «doloroso» o «creador de tristeza». Aunque no pertenecía al pueblo de Dios, se cree que Jabes fue descendiente de Ceneos, siendo incorporado a la tribu de Judá, una de las 12 de Israel.
Fue un hombre insigne y temeroso de Dios, el cual reconoció como el origen de toda bendición sobre el hombre, pidiéndole en la reconocida «oración de Jabes ensancha mi territorio», la misericordia de Dios y bienestar en la vida sobre la tierra, librándolo de todo sufrimiento.
¿Qué significado tiene la oración de Jabes ensancha mi territorio?
Según la biblia, Jabes al conocer sobre Dios se enaltece para alabarlo y buscar refugio ante él. Jabes reconoce a Dios como un ser divino y verdadero, encomendándose plenamente a él y demostrando toda su fe mediante la oración, pidiéndole ser protegido contra todo mal.
De acuerdo a creencia antiguas, el nombre de Jabes significa fuente de dolor o tristeza, siendo un hombre que creció con una marca y un pasado sumamente doloroso, que logró cambiar al conectarse de corazón con Dios y súplicar su misericordia.
Jabes, fue el más sobresaliente de sus hermanos, nacido del sufrimiento y desconsuelo de su madre, lo cual es relacionado con el producto del pecado de los hombres sobre la tierra (Génesis 3:16).
Sin embargo, logró cambiar su destino a pesar de esta relación, Jabes exalta a Dios como su protector, rogándole de corazón su misericordia y permitiendo obtener la gracia de Señor ante sus súplicas y demostraciones de fe.
Jabes, a pesar de ser distante al pueblo de Israel, no era digno de recibir la promesa para dicha nación, no obstante, gracias a su fe y la bondad de Dios logró ser aceptado y ser miembro de la tribú de Judá, relacionada con la alabanza al Señor.
Características de la oración de Jabes ensancha mi territorio
La oración de Jabes ensancha mi territorio tiene diferentes peculiaridades que comprueban el amor de Dios con el hombre y su misericordia con él cuando la súplica se pide desde el corazón.
En este sentido, la oración de Jabes se puede analizar por partes para tener una mejor interpretación de su propósito y particularidades.
1.- «Oh, Dios, si en verdad me dieras tu bendición»
En este fragmento de la oración Jabes demuestra su fe y creencia de corazón en Dios, suplicándole como fuente divina de protección que le permitiera ser digno de él y obtener su bendición.
Dios ha bendecido a todos los hombres con dones, fe y su Espíritu para obtener su misericordia, el que pide con fe obtendrá la gracia del Padre.
«Todo buen obsequio y don proviene de lo alto, producto del Padre de las luces» (Santiago 1:17).
2.- «Y si ensancharas mi territorio»
Jabes le súplica a Dios obtener su misericordia y lograr prosperidad en la vida material, es decir, expandir sus espacios para tener un mejor desenvolvimiento de sus capacidades.
Sea en la iglesia, el trabajo o el hogar, Dios ha bendecido a todo hombre y le ha otorgado un terreno lleno de bendiciones eternas y espirituales que le permitirán mejorar su fe y obtener la gracia de Dios.
El que crea realmente en Dios y le demuestre toda su fe, será beneficiado del Padre y bendecido con el ensanchamiento de su territorio, el cual puede referirse a tu familia, tu trabajo y proyectos personales o laborales. El que pide con fe obtiene la gracia del Señor.
«Dios ha hecho al hombre prosperar y este fructificará en la tierra» (Génesis 26:22).
3.- «Y si tu mano estuviese conmigo»
Jabes pidió la protección y guía de Dios para sostenerse y lograr seguridad en sus movimientos o acciones, demostrando toda su confianza y creencia en el Señor y poniendo a su disposición todos sus proyectos para que les dé dirección y no permita que pierdan su enfoque, ni caigan en malos caminos.
De este modo, se hace evidente que tanto para Jabes como para el resto de los hombres es necesario tener la mano de Dios como apoyo tanto en los buenos como malos momentos, brindando protección y la elevación de la fe.
La mamo de Dios representa todo su poder sobre el hombre y su presencia en la vida de quienes le piden su bendición y protección, solo el que crea realmente en Dios verá su gloria y misericordia (Juan 11:40).
«No existe nada mejor para el hombre, sino que este coma, beba y que su alma esté alegre en su trabajo. Todo esto es de la mano de Dios» (Eclesiastés 2:24).
En este fragmento de la oración Fabes pide a Dios protección y que lo guarde de todo mal que pueda traer consigo los favores súplicados. Todo triunfo puede originar a futuro tanto éxitos como fracasos debido a la autosuficiencia que pueda tener la persona, por lo que la guía del Padre será elemental para la bendición y prosperidad de todos los proyectos.
«Dios mío, en ti confió, sálvame de todos los que me persiguen y ayúdame a librarme de todo mal» (Salmos 7:1).
5.- «Para que no me dañase» o «para que no me causase dolor»
Fabes le pide a Dios su apoyo y se encomienda a él plenamente para que lo cuide de todo daño que lo pueda dañar u ocasionar algún daño permanente. La vida del hombre es sujeta a cambios drásticos en su entorno, pudiendo enfrentar obstáculos o éxitos de forma cercana y de esta forma sufrir daños o bendiciones, solo con Dios de guía podrás librarte de esas aflicciones.
«No nos dejes caer, líbranos de todo mal» (Mateo 6:13).
¿Cómo puedes aplicar la oración de Jabes en tu vida?
Un obstáculo que muchos presentan a la hora de orar o buscar establecer comunicación con Dios, es repetir palabras vagamente palabras sin demostrar la confianza y creencia plena en él como Padre Todopoderoso, de nada servirá repetir oraciones si estas no salen realmente del corazón.
Jabes enseñó cómo orar desde el corazón puede ser fructífero y lograr la misericordia de Dios ante las súplicas, para seguir sus pasos puedes cumplir las siguientes tareas:
- Ora todas las mañanas empleando la oración de Jabes (o una plegaria propia similar).
- Transcribe la oración de Jabes y colócala en tu biblia, agenda y/o un lugar visible que te permita recordarla y tener a Dios presente en todas tus actividades.
- Profundiza sobre las plegarias de Jabes y cómo estas pueden ayudarte a mejorar tu relación con Dios (en internet encontrarás artículos interesantes y un libro de nombre «La oración de Jabes» del escritor Bruce Wilkinson, los cuales te ayudarán a cumplir esta tarea).
- Comunícale a alguien en tu entorno cercano sobre tu compromiso adquirido de realizar diariamente la oración de Jabes y la importancia que tiene para ti, esto te ayudará a tener apoyo en la tarea y evitar que desistas ante las adversidades.
- Elabora un registro de los cambios que se han producido en tu entorno y agradécele a Dios por ellos.
- Amplia los propósitos de tu oración incluyendo a tu familia, amigos, compañeros de estudio bíblico, vecinos o miembros de un grupo o actividades específicas, ora por ellos y dale a conocer la oración de Jabes y todos los beneficios que te ha traído.
- Sé constante, a pesar de que quizás no veas resultados favorables a tus súplicas de forma rápida, no desistas y continua con este propósito.
Es importante tener en cuenta que orar no se trata de repetir constantemente palabras de otras personas, solo las plegarias de corazón tendrán la misericordia de Dios y la concesión de tus favores.
Dios escucha las plegarias nobles de todos los hombres y le dará la respuesta a cada uno de acuerdo a su infinita sabiduría, ten fe y veras que como Jabes lograrás obtener los favores del Señor, el cual siempre deseará darte lo mejor e incluso más cosas de las que pidas, solo es necesario pedir con el corazón y con un propósito dado.
«Y todo lo que pidieses en oración, creyendo, lo recibirás» (Mateo 21:22).
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